Sobre mí
Aida Beneyto
Psicóloga Colegiada
¡Bienvenidos! Mi nombre es Aida Beneyto.
Soy psicóloga, Terapeuta Gestalt y estoy formada en Salud Mental Perinatal.
Soy una persona comprometida, curiosa, responsable, a la vez que una gran lectora. Me apasiona lo relativo al mundo emocional, aquello que nos diferencia y nos acerca, aquello que nos mueve a nuestra mejor versión y aquello que nos deja estancados, y me gusta contribuir a que cada uno se acerque lo más posible a su bienestar y tranquilidad. Así que me siento afortunada y agradecida de poder ejercer esta profesión.
Por otra parte, soy nieta, hija, hermana, mamá, pareja, compañera, amiga, vecina y así hasta el infinito. Esta consciencia me lleva a darme cuenta de que vivo conectada con el resto y que formo parte de un sistema, que a la vez forma parte de otros sistemas. Y así, en nuestras interacciones somos capaces de influir y, a la vez, éstas nos influyen. Esta mirada ecosistémica también me caracteriza.
«Con todo esto y mis experiencias vitales, me gustaría acompañarte a sanar la relación más importante de tu vida, la que mantienes contigo mism@.»
Aida Beneyto
Psicóloga Colegiada
Un espacio de conexión contigo mismo.
En mi consulta te ofrezco un espacio seguro, cálido y acogedor que te ayudará a conectar contigo mism@, a expresar aquello vivo dentro de ti, a explorar nuevas formas de estar contigo, en las relaciones y en la vida.
En resumen, un espacio de sanación donde, con mi guía, buscaremos allí donde se hayan todas las respuestas, dentro de ti. ¿Te acompaño?
¿Qué te ofrezco?
Una atención personalizada, un acompañamiento desde el respeto para atender los problemas psicoemocionales, con una orientación principalmente humanista y ecosistémica. Para ello ofrezco una mirada holística desde la que atender todas las áreas que conforman a la persona: emocional, mental, corporal, relacional y trascendental.
Juntos desarrollaremos recursos que te permitan acercarte a la satisfacción de tus necesidades y a vivir la vida de forma más consciente y conectada.
Mi formación y experiencia a tu servicio
Mi formación y experiencia me permiten tratar una amplia variedad de problemáticas, desde emociones como la ansiedad, la culpa, el miedo o la tristeza, entre otras, hasta la baja autoestima, el estrés, las fobias y mucho más. En cada caso, mi objetivo es ayudar a mis pacientes a identificar y superar los patrones que les causan malestar emocional, y enseñarles herramientas prácticas para manejar situaciones difíciles y fomentar su crecimiento personal.
Pero, además, el trabajo que más creo que nos puede ayudar es el relacionado con la prevención de este malestar emocional. Para ello el trabajo a través del autoconocimiento, el asentar una sana autoestima y la proyección de una vida que nos ilusione y nos llene es la clave.
Aida Beneyto
Detallista, empática, profesional,…proceso muy bien dirigido para la meta que nos propusimos. Una gran experiencia.
Saul S.
Gran profesional y mejor persona. Aida transmite su paz y tranquilidad y te ayuda desde la sencillez, transformando el caos en calma y convirtiendo lo difícil en posible.
Patricia
Aida ha sido una gran ayuda en mi crecimiento personal, siempre con cariño y profesionalidad. Una gran profesional y siempre dispuesta a que des lo mejor de tu vida.
Un placer contar con ella y con un recuerdo, aunque duro, un recuerdo precioso de mi proceso. ¡Muchas gracias Aida por todo!
Laura B.
Desde el primer momento que entras por la puerta te sientes acogido, te da paz. Aida es una persona maravillosa y una gran profesional. Gracias a ella he podido avanzar y entenderme de una forma que nunca habría llegado a comprender si no fuese por su ayuda. La he recomendado y la seguiré recomendando. Sin duda confiaría en ella.
Sergio U.
Acudí a su consulta por una ruptura que me sobrepasó a muchos niveles, y sin saber muy bien cómo gestionar mis emociones. Probé en otras consultas y la verdad era frustrante «no conectar» con alguien de quien necesitaba ayuda.
Con Aída encontré un sitio donde me sentí cómodo por primera vez para hablar. Aprendí a entenderme y empecé a escucharme.
Dejé de ir a consulta después de varios meses por un cambio laboral, pero me llevé algo impagable de allí: aprendí a disfrutar de mi mismo y a tratarme mucho mejor. Una amiga aún me dice cada cierto tiempo «menos mal que conociste a Aída